Mike Tyson’s Punch-Out fue uno de los mejores juegos para NES. Tenía una mecánica de juego sencilla pero sus personajes estereotipados y la dificultad cada vez mayor resultó ser una fórmula extrañamente convincente.
Nintendo esperaba traducir este éxito a su máquina insignia de 16 bit y aplicar un estilo que fuera similar a sus juegos de arcade Punch-Out y Super Punch-Out. Además de los sprites más grandes y más parecidos a dibujos animados, el juego añadió algunos nuevos personajes al selecto grupo procedente de la consola anterior y de la máquina arcade.
Al igual que los anteriores títulos de la serie Punch-Out!, Super Punch-Out! requiere buena sincronización y habilidades de reconocimiento de patrones para reaccionar a los ataques de cada oponente. A medida que el jugador avanza a través de los circuitos del juego, los enemigos se vuelven más difíciles de predecir y derrotar.
A pesar de que Super Punch-Out es muy divertido, no llegan a alcanzar el mismo nervio que Mike Tyson’s Punch-Out en la NES. Los nuevos personajes no son tan interesantes, el juego da pistas más obvias en cuanto a cuándo vendrán los ataques especiales, y el entrenador de Mac, Doc, ha desaparecido por completo. Todo esto explica por qué Super Punch-Out no fue un fenómeno cultural en el mundo de los videojuegos como su hermano de la NES, pero aún así es una pieza valiosa de la biblioteca de la SNES.
